Tras mi paso por Berlín, hacía ya muchos días que no me ponía a ello.
Berlín, como experiencia...buah! Una pasada, por la ciudad en si misma, por la historia que tiene, por la diversidad...Es cierto que al principio me costó cogerme al ritmo (todo lo contrario que en Taizé). Sin parar, vas de un sitio a otro...Pero, reconozco que ha sido una experiencia fenomenal. Además me traigo momentos guardados, lecturas y frases para reflexionar y meditar y recordarlas en las horas difíciles. Y gente y sonrisas que recordar. No sé qué pasará al año que viene, pero hay posibilidades que repita. Por el hecho de que fin de año, está bien, pero me siento fuera de lugar, y sin embargo, allí...es todo más diferente. La gente que va al encuentro te sonríe, te mira a los ojos...No puedo expresar lo que es estar acabando la oración y que se gire quien tienes a tu lado, te sonría y te diga HAPPY NEW YEAR de esa forma tan cercana...
Por otro lado, quería resaltar y de nuevo agradecer a los Reyes Magos lo bien que se han portado conmigo este año...¡jo! Creo que tampoco he sido tan buena como para todo lo que he recibido. Además este año hasta en sitios que no me esperaba...¡gracias!
Y por último, gracias por la cena de ayer, y por los momentos que compartimos. Por hacerme sentir una más, y siempre recibirme de la mejor manera posible. Mi corazón siempre sonríe cuando está a vuestro lado. Me quedo con una frase: te puedes ir sola a Berlín, pero a casa no. Gracias de corazón. Se os quiere mucho.
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