19 febrero 2012

Todo el mundo cree saber mejor que yo qué tengo que hacer. Mucha gente, me echa en cara lo que hago o lo que no hago.

Hace un tiempo decidí apostar por mi. Y me da igual si la gente lo entiende o no. Me da igual si piensan que tiro mi vida, o que me separo, o que soy una aburrida, o lo que sea. No soy convencional, lo sé. No soy la típica chica de 26 años "normal". O lo que hoy en día se considera normal.

Soy buena persona, cuido de los demás, simpática, amable, atenta, entregada a lo que hago, reservada, reflexiva...Y aún así la gente se cree en el derecho de pensar por mi, de juzgar...En algunas ocasiones me siento "sola", porque a pesar de ello, no consigo que gente que es importante para mi me acompañen en decisiones, momentos...pero no por ello me siento a reprochar. Eso sí, ellos sí pueden tomarse el lujo de criticar y recriminar aquello que no se adapta a sus necesidades.

Me siento...¿decepcionada? No lo sé. Tal vez un poco, porque me gustaría que vieran el esfuerzo, que intentaran entender...Pero en el fondo me siento orgullosa y satisfecha de lo que hago.Más adelante tendré que tomar más decisiones, pero hoy por hoy, me siento bien (y eso ya es mucho más de lo que podía decir hace un tiempo).

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